He de reconocer que Xabi Alonso es una de mis grandes debilidades. El mediocampista blanco es el eje sobre el que se vertebra este Real Madrid. Su peso específico en la influencia del juego del Madrid sería mayor si tuviera a su alrededor a más jugadores de toque que de llegada. Más elaboración que determinación. Pero esa es otra de las grandes virtudes de Xabi Alonso; Es 
camaleónico.
Sabe adaptarse a la perfección al medio. Si se rodea de balas, lanza rápido la pelota, haciendo de la transición defensa-ataque un arte y no una casualidad. En cambio si se rodea de peloteros (pequeñitos y de rojo…) es capaz de mezclar con ellos como si hubiera sido engendrado en la mismísima Masia.
La temporada no está siendo fácil para el tolosarra. Llegó a Madrid sabiendo que los mediáticos eran otros, pero conociendo a la perfección su función como elemento cohesionador del conjunto de Pellegrini. El binomio Xabi-Lass no ha terminado de cuajar y ahora le sitúan al lado a Fernando Gago, otro parche a la espera de la definición como conjunto del Real Madrid, que sin duda se producirá la próxima temporada.
En mi opinión, Xabi Alonso es el mejor jugador del mundo en su parcela. Combina como nadie el pase largo y el corto. Roba más de lo que aparenta, su implicación en este Real Madrid está por encima de la media del equipo y además es español. ¿Qué más podemos pedir? Por pedir… que no le sitúen más a Lass al lado y que lo rodeen el próximo año de un par de peloteros de verdad.
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